Las subastas de viviendas es un procedimiento muy común que se da cuando un inmueble está vinculado a una deuda reclamada judicialmente o se encuentra embargado. Generalmente en estas subastas el precio de las viviendas es menor al habitual por lo que suponen una oportunidad para los compradores.
¿Qué es una subasta de vivienda?
Se trata de un procedimiento judicial en el que se oferta una vivienda hipotecada o embargada. Estas subastas pueden suponer un ahorro de hasta un 50% en comparación con su valor real.
¿Cómo participar en estas subastas?
Para comprar una vivienda en una subasta es necesario abonar un depósito del 5% del total del inmueble subastado, así como tener la capacidad económica suficiente para alcanzar el precio final. Por lo tanto, todo el mundo tiene acceso a una subasta de vivienda, tanto, personas físicas como jurídicas.
¿Cómo funcionan las subastas inmobiliarias?
La compra de una vivienda subastada no está exenta de impuestos, se deberá abonar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados.
Estas subastas son públicas y actualmente se realiza de forma online, a través del portal de la Agencia Estatal del Boletín Oficial del Estado (AEBOE).
Una vez empiezan las pujas de una vivienda, se dejará un margen de 20 días para que todo aquel que lo desee, pueda pujar por el inmueble.
Tras la puja final, si el pujante es el mejor postor se le abrirá un plazo para abonar en el juzgado la cantidad final.
¿Cómo saber que pisos salen a subasta?
Existen algunas herramientas online como la de Sareb que localizan inmuebles que se subastan. Aparte de este tipo de webs, es principalmente en el portal público de la AEBOE donde se pueden revisar la mayoría de las viviendas subastadas. Aquí aparece la fecha del inicio de la subasta y las características de la vivienda.
Ventajas y desventajas de comprar un piso en subasta
Comprar una vivienda subastada tiene como principal ventaja el ahorro respecto al valor real de mercado. No obstante, también tiene ciertos inconvenientes que se deben tener en cuenta.
Es recomendable pedir la nota simple de la vivienda, antes de pujar, para asegurarse de que no compramos una vivienda con deudas. Ya que, en el caso de haberlas y ganar la puja, deberá ser el nuevo propietario quien se encargue de ellas.
Entre las ventajas de una vivienda de este tipo se señalan principalmente: su buen precio, y que no hace falta hacer la tasación de la vivienda y además puedes afrontar el pago mediante una hipoteca.