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Seguro de vida hipotecario: ¿Qué es y para qué sirve?

El seguro de vida hipotecario es una opción importante para las personas que desean protegerse financieramente a sí mismas y a sus familias. En caso de circunstancias imprevistas, esta cobertura puede utilizarse para ayudar a pagar un préstamo contraído con una entidad bancaria, lo que significa que los seres queridos no tendrán la carga de las deudas cuando falten. Si conoce todos los detalles de primera mano, se asegurará de obtener justo lo que necesita de su plan de protección hipotecaria.

El seguro de vida hipotecario puede proporcionar una protección financiera inestimable. Al cubrir las cuotas del préstamo en caso de fallecimiento o invalidez de un asegurado, evita que las familias tengan que cargar con grandes sumas (como las hipotecas) en un momento en el que ya están pasando apuros emocionales y financieros.

Con la introducción de una nueva Ley Hipotecaria, los bancos ofrecen ahora dos opciones: una con una póliza de seguro vinculada que ofrece un tipo de interés más competitivo. Pero esta opción puede resultar más cara a largo plazo, ya que estas pólizas suelen tener precios desorbitados en comparación con lo que ofrecen las aseguradoras especializadas. Por lo tanto, antes de tomar una decisión, los propietarios deben evaluar sus necesidades financieras y consultar a especialistas en seguros para obtener un mejor valor global de la cobertura de vida.

Ejemplo

Pongamos un ejemplo: En caso de fallecimiento, entrarían en juego los 300.000 euros de un seguro de vida. El banco que te ha concedido la hipoteca es el primero en recibir esta cuantiosa suma, sin embargo 100.000 euros quedan a disposición de tu pareja asegurando que puedan seguir amortizando lo que queda de la deuda inicial de tu préstamo de 200.000€.

El banco recuperará su deuda pendiente, mientras que tu pareja hereda los 200.000 euros restantes y es responsable de pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Si hubiera sido designado como primer beneficiario del seguro de vida, no sólo tendría que pagar el Impuesto sobre la Renta por el importe total de 300.000€, sino también liquidar el saldo existente de la hipoteca.

Por eso siempre recomendamos, al contratar un seguro de vida hipotecario, que el banco figure como primer beneficiario.

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