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¿Qué consecuencias tiene la inflación sobre mi vida cotidiana?

Los recientes datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que la tasa de inflación interanual de febrero ha sido del 7,4%, la más alta registrada desde 1989 y que alegra a poca gente, ya que ha sido superada recientemente por el crecimiento económico de España.

Las razones principales para este acontecimiento se debe a la subida del precio de la electricidad y de la gasolina. Esto surge a raíz del conflicto bélico que se está viviendo en estos instantes entre Ucrania y Rusia.

Sin embargo, las causas de este pico no se debe buscar solo en los recursos energéticos. Un comunicado del INE ha sugerido que ha habido subidas generalizadas en lo que respecta a los componentes del IPC. Esto se ha notado especialmente en los casos de la alimentación y de las bebidas no alcohólicas.

1. Pierdes poder adquisitivo

Uno de los puntos más notables es el de la perdida del nivel adquisitivo. Si los precios de las cosas aumentan y tu salario no, acabarás viendo cómo con el mismo dinero acabas comprando menos cosas. Y ya no solo en en bienes de lujo, sino también en cosas imprescindibles como la comida, la electricidad, el agua…

Los convenios colectivos han experimentado un aumento constante en los últimos años, pero el actual 1,47% al 2% sigue siendo insuficiente con una inflación del 6%.

Los ingresos de millones de trabajadores se redujeron en más de un 5% en un año. Por no hablar de los autónomos y de los que trabajan por cuenta propia, ¡mucha gente está en peligro porque su poder adquisitivo también fluctúa con estos cambios cada vez que hay una crisis económica!

El clima económico actual no es favorable para la mayoría de la gente, lo que significa que los precios pueden seguir subiendo. El factor más importante en este aumento de los costes son los precios del petróleo y del gas; sin embargo, también hay un gran impacto de los productos alimenticios como la carne o las verduras, ya que también dependen en gran medida de estos recursos.

2. Se devalúan tus ahorros

La pandemia del COVID-19 llevó a los españoles a ahorrar más, para estar mejor preparados ante los imprevistos que pudieran ocurrir. Según datos del Banco de España, el año pasado se batió un récord con un aumento del 4%..

La crisis económica española ha llegado con fuerza a los hogares. El Banco de España informa de que el año pasado se realizaron depósitos por valor de 958.000 millones de euros, un máximo histórico y suficiente para comprar más de 60.000 millones de dólares A esta cantidad hay que añadir los casi 80 mil millones escondidos «bajo el colchón», según las cuentas financieras publicadas por ellos, que son ahorros guardados en las casas de los ciudadanos porque tienen demasiado miedo de lo que pueda pasar si su país empeora.

3. A la larga aumentará tu hipoteca

La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ha reconocido que la inflación es una preocupación para muchos en toda Europa. No descartó la posibilidad de subir los tipos de interés antes de finales de este año, aunque señaló que sería una medida «experimental» con consecuencias potencialmente negativas si EGUI/BCE.

A principios de febrero de 2019, cuando se le preguntó sobre posibles aumentos en cifras clave como el desempleo y los precios al por menor, que estaban todos en líneas planas en comparación con los meses anteriores, mientras que las discusiones se centraron más en el sistema bancario de Italia; el presidente del BCE respondió mencionando cómo la unidad entre los estados miembros sigue siendo fuerte a pesar de algunos titulares recientes que sugieren lo contrario, debido principalmente a que han estado trabajando bien juntos desde el inicio – refiriéndose específicamente al Brexit

4. Puedes tener menos ofertas de trabajo

El coste de la vida se está disparando, y no sólo para el ciudadano medio. Año tras año, las tasas de inflación alcanzan cotas que no se veían desde antes de las décadas Los últimos datos muestran que esta tendencia continúa con un 35%. Se debe principalmente a que los recursos energéticos son tan caros en estos momentos; si se excluyeran de la ecuación actual (como hicimos nosotros), los precios sólo subirían un 11%..

5. Tendrás menos margen para gastar en cosas superfluas

Si la inflación alcanza niveles épicos, los consumidores podrían empezar a recortar sus gastos. ¡Esto sería un gran problema para cualquier economía que aún esté tratando de recuperarse de la crisis COVID y podría causar más problemas que soluciones en una situación ya frágil!

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